Yo quiero tocar

Un gorrión abriendo la jornada, viendo el sol, es todo de lo mejor, de hoy, desde los tomates gozones, en la tierra, a las rosas de castilla, las frambuesas, mientras, en el salón de té de París, en el mostrador de Reyes, "sachers", éclers, "tres leches", waffles; todos, en una canasta, sobre un mantel de Memphis, con una copa de "Brut", cubiertos de rocío, crema inglesa, miel de Maple, con una cereza arriba, bañados, tibios, en mis manos, suaves, enloquecedores; hoy, eres tú, en la mesa, la entrada al templo, te miro, mi "collage", mi día de campo, el rabilllo hacia el universo, que me hipnotice, me haga concentrar, contemplar eternamente, tocar con los ojos, oler, morder con ellos también, en tus yemas, tus labios, tus capullos. un manantial, grosellas, frutos rojos, miel escapándose a gotas, espesas, largas; mis manos abrazan el suelo, mis oídos, mi cuerpo se hace un nudo, un "twister", para alcanzar mis antojos, saber más de tí; hoy me acosó el mundo, mañana me va a lapidar; antes de ir a Cesáreo, quiero tu jardín, lo tengo merecido, no quiero esperarme, por una foto, un mordisco; me siento complaciente, el hombre complaciente, mañana vamos a pasear ota vez, o te doy una casa en Mykonos, un Ferrari, o un listón de Swarovski, lápiz, chupetines, medias; lo tienes todo, ahora, te queda "mamma mía", con tu vestido de seda; ¿puedo? ¿me dejas? ¿me harías feliz?