Flor de romero

Está bien. Me rindo. Tú tienes la razón. No puedo sin ti. Me guías; puedes pedirme lo que quieras; soy tu mayordomo, un chocolate, algo caliente, para tus manos, de seda. Todo vuelve a su cauce, aquí no pasa nada, normal, y ya monté otra película, otro Cannes, mordí el anzuelo, haciendo un bosquejo nuevo, mi obra de arte nueva. Estás ahí, pues, estás siempre, me acuerdo, no puedo olvidarte. Yo, moreno, marinado, de sal, de especias, tú eres, mi flor, mi fragancia, de romero, de rosa; eres lo que busco, soy tu agente, vas a conocer el mar, Beverly Hills, Punta del Este, un gran mural, tus ojos morenos, tus manos, dátiles, las mejores piernas; serás Marlene Dietrich, Beyoncé, firmarás un contrato jugoso, con Pretty Polly, Montenapoleone, caminando, bailando en el salón, a gusto en el canapé, rendido a ti. Aunque no esté, me confunda en la selva, viva en la espesura, me vaya de retiro, vas a estar de todas formas; no sé qué más hacer para no hacerte caso, pensar en ti menos, en tu cumple, tu guardarropa. Igual, tu estás, allá, en tu casa, tu salón de té, con tus gentes. Yo aquí, pintando, creando la nueva Sagrada Familia, contemplando la cascada, el amanecer, sin decir algo, escuchándonos, sintiéndonos acompañados. No hay mucha opción. Mejor puede ser así, no forzarlo, dejar el ciclo del agua, como siempre, quedamos amigos, vecinos, colegas de mesa, de onces, seré “muy bello”, y serás, eres, mi fantasía, cuando vaya al salón, al teatro, Juanchito, Viena. Eres inolvidable, un clásico, se lo contaré a mis descendientes, perdurarás en la nueva era.

Comentarios

Gui"laine" ha dicho que…
Inolvidable.

Entradas populares