Es la mejor opción
Ese hombre, el hombre, el de la gente, el más apropiado para sacar esto adelante. Esa mujer, señorita, es muy de su casa, de sus papás, formal, sin malicia, cumpliendo con sus deberes, en su casa, su estudio, es buena, tierna, y es femenina, mira de medio lado, camina suavemente, es una florecita por siempre. El puede tener esa florecita, claro que sí. Nadie más formal, educado, buena gente, sacrificado, poniendo su empeño, en su casa, en su estudio también. Este no se anda con fachas, con el pelo largo, no dice groserías, colabora, cede el puesto, no gasta el agua, es formal en la junta, la cena, la caseta, se sabe la capital de China, Bangladesh, Micronesia, habla de lo que sabe, y mantiene su sonrisa, de niño pequeño, así estén vacilándolo. El tiene lo que ella necesita, ahora está leyendo poesía, escuchando la rondalla, no hace el ridículo, en Le Patissier, el baile, es serio, va a ser fiel, buen novio, buen yerno. Ante los ojos del mundo, los que votan, van a misa el domingo, quieren la paz, es un “caballero”, hacen buena pareja, van a formar un hogar, de ensueño, con esfuerzo y dedicación. Bueno, cada vez entiendo más sobre “Todo es del color del cristal con que se mire”. Para ella es un muchacho bueno, servicial, un estupendo amigo, consejero, limpio, aunque no es su tipo, no satisface sus sueños, sus deseos, de ser mujer, estar viva, y pues, ya tiene novio, o esta pensando en otra persona, aunque se la pase por la calle, se la pase pintando, venda dibujos, pendientes, de ilusiones, esté vivo también y aunque el muchacho bueno, sea tan educado, incansable, o le dé la intensidad. Yo he sido a gusto del mundo, la estudiante, la rockera, la bailarina, me he caído de la bicicleta, de nariz, de barriga, he aprendido mi lección, me gusta más ser yo, y así todavía, la mejor opción para uno, es opuesta la mejor para otro, u otra, y seguiré cayéndome, sentirme arrancado del suelo, y esperándola, a ver cuándo salimos, cuándo bailamos. La profe, la directora también va a decirme que no. Pero, ha sido también positivo, he sido la opción para la chica de la minifalda, la azucena, la “peque”, aunque no esté en mis cabales, o no pague las cuotas del techo. La mejor opción no existe, Las encuestas de opinión, los “reality show” menos. Seguiré con mi baile, mi pelo largo, mi “Playboy”, la editorial, las fotos, la pose casual, inocente, tremenda. Aquí no es la opción, pero es sana, glamorosa, deliciosa.
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