Vanidosa
El chocolate, la sobremesa, las onces, es también por la mañana, antes del cenit, pero no puedo, tengo fiebre, estoy desvelado, y hoy era el día; sol, chubasco, fresco, todo es tan bogotano, londinense, parisino, comfortable, elegante, “kawaii”, redondas en sol sostenido, pasos de piel, seda, frutos rojos, sobre láminas de corteza, miel, castañuelas, los palos del flamenco, en el salón blanco, el hotel boutique, los cuentos para los más formales. Me quedé dormido, estoy dormido, no puedo abordarlo, abordarte, adquirir las destrezas, navegar con agilidad, por el jardín, tu jardín; después del merengue, el cha cha chá, en puntas, sin hombreras, sin recato, sin pena, sigue la balada, el fox, tu almohada, los espejos, tus ojos húmedos, tus mejillas coloradas, floreciendo; esta tarde, noche, eres de los nuevos retoños, mañana amanecerás entre heliconias, claveles, rosas de Castilla, fuiste elegida, eres soberana, bailarás con el príncipe, te van a mirar, eres la menor de la casa, puedes pedir lo que más te guste. A veces, para mí, es como las ilustraciones de los libros, los juegos, en la época de la patilla, la TV a color, tras de tí, en tu bici, sin contornos, con tu boca pequeñísima, tus slacks, tus plataformas, entre margaritas, y tampoco puedo alcanzarte, conseguir el turno, pedir la palabra, como en la fiesta, entre papel, semillas, pétalos, fucsia, mango, turquesa, y todavía quiero que luzcas como esa tarde, y después me cantes, y por fin me cargues, me duerma en tus brazos. Bueno,no estamos agarrados, nos simpatizamos, todavía soy tu acompañante, tu compinche, cargando tu equipaje, siendo todo oídos, todo ojos, de tus juegos, tus antojos, tu taller de cine, artes plásticas, ser el trazo perfecto, dar los mejores colores, hacer historia. Para mí, es una cualidad, una virtud, un don del universo, te hace rebelde, distinta, incomparable, me hace reír, sonrojar, como cuando caminas, o bailas,o cantas, me hace olvidar de la agenda del día, para quedarme, tras de tí, no tener oficio, buscar lo que perdí, o no perdí, en tus tonterías, tus fijaciones, eso que te gusta, y hace que me guste. Te dejo que te pongas de nuevo los escarpines que hacen ver alta, cantes otra vez, estaré atento, despierto.
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