¿Un gran día?

“Hoy me he levantado...”, “¿Por qué será que me gusta la noche?” Hoy para mí es barra libre, estoy exento de impuestos, la agencia me calificó AAA, saldré con la corista, la revelacion de Disney, la actriz italiana, “Anni 60”, quién será, pasaré por ella, en la carroza de Maranello, nos quedaremos en el Ritz, la convidaré unos escarpines, ojo de pez, de aguja, de piel, para no envolverlos, se los lleve puestos, despacio, entre tréboles, para que despierte, con ellos, puestos. Me siento como Owens, Phelps, el monoplaza rojo, antes de arrancar, quiero tenerlo todo, bebérmelo todo, contigo todo, de tí, todo. Me siento tan así, contento, furioso, alentado, insano, que se me olvidó el salón blanco, con su sofá, “chill”, “retro”, la huerta, el pan, la rúgula, los frutos rojos. Y olvidé que este manto, esta lava, que me domina, se retira, se desnuda, de deja caer al sol, con un roce, un abrazo, de pétalo, de oso, “slow”, sin tiempo. Yo no sé ser tosco, o hacer que me sirvan rápido, estar a tiempo para la junta, las cuentas. Mas, mi aperitivo, mis escalopes, mi “smooth”, los recibo en mi boca, me los bebo, aquí, ahora, sin afán, contemplando los colores, la soya, los comensales, hambrientos, cortos de tiempo, igual que yo, emocionados, ansiosos, por tener lo que les hace falta. Ya me puedo controlar, ya puedo ir a verte, sin ponerme de mal genio con el “garcon”, y verte, tomarte fotos, en tu mesa, envolviendo tu silla, con tus pasos altos. No mentiras, no me hagas caso, no te arrancaré de la tierra, o te esconderé o algo así. Te miraré solo, como las azucenas, ante las montañas, a caballo, seré tierno, pues, yo soy tierno siempre. Ya aprendí, a lo menos, no nos pasará algo en la carretera, no nos dará jaqueca al día siguiente, ahora sí estaremos exentos de cuentas, no sobrará para alguna emergencia. Ahora sí sea tal vez un gran día, uno plácido, uno delicioso.